Este sábado llega la tercera clasificatoria del Circuito de Extremadura a Valencia de Alcántara. Ante esta cita, hemos querido conocer más a fondo a uno de los novilleros que completa el cartel, Tristán Barroso. Tiene 18 años y nació en Madrid, aunque hace ya un tiempo se asentó en Extremadura.
Con una actitud serena, Tristán Barroso expresa su deseo de interpretar el toreo clásico de una manera distinta. «Me gusta torear lo más difícil posible, intentar interpretar a mi manera, ser un torero diferente», confiesa con pasión.
Su conexión especial con Extremadura, donde llegó a la temprana edad de 14 años, ha hecho que esta tierra sea su hogar adoptivo. «Para mí, es como si fuese mi segunda casa», dice con una sonrisa. Desde entonces, ha sido recibido con los brazos abiertos.
Parte fundamental de su formación taurina la ha recibido gracias a la Escuela Taurina de la Diputación de Badajoz, a la que muestra agradecimiento. «Profesionalmente me ha aportado todo, gracias a ellos tengo los conocimientos que tengo ahora», reconoce Tristán. La escuela ha sido un pilar en su carrera, brindándole la base necesaria para desarrollarse como torero y ofreciéndole la oportunidad de encontrar su apoderado.
Desde que dio sus primeros pasos, Tristán Barroso ha ido adentrando en las novilladas. Aunque tuvo un percance en el hombro que lo ha mantenido apartado por un tiempo, el joven torero ha regresado con mucha fuerza.
Con miras al futuro, Tristán tiene claro su objetivo: «Quiero ser un novillero puntero, quiero ser bueno y estar en boca de los aficionados», declara con ambición. Ahora, pretende ganar el Circuito de Novilladas de Extremadura.
La preparación es clave para cualquier torero, y Tristán Barroso no es la excepción. A lo largo del año, se prepara con intensidad, disfrutando cada momento del proceso. «Me preparo igual todo el año, pero cuando estás más cerca de la fecha, tienes más ganas e ilusión», explica.
